lunes, 8 de agosto de 2011

McFarmacias


Entré a la farmacia con dolor de estómago. Salí con dolor de cabeza.

A algún genio de la mercadotecnia se le ocurrió que la experiencia de comprar medicamentos sería menos dramática (y más lucrativa, claro) si se asemejara a comprar hamburguesas.

Así que ahora, cuando eliges una cadena farmacéutica para hacer tus compras, tienes que soportar una retahíla de desesperantes preguntas que los pobres dependientes repiten de manera robotizada durante toda la jornada; sí, como ya es típico en supermercados, cines y restaurantes de comida rápida. Aquella onda de “por 15 pesos más ¿quiere su combo grande?” o “¿gusta una galleta de chocolate para acompañar su orden?” pero versión medicinal.

Hace poco, una tarde veraniega en que tenía prisa (y diarrea) se gestó mi aversión hacia estas farmacias. Yo sólo quería un Pepto. Un maldito frasco de Pepto Bismol. “Paso de volada”, pensé. Y cuando al fin llegué a la caja tuve que transitar por este interrogatorio:

  • ¿Cuenta con monedero de la farmacia?
  • No
  • ¿Gusta abrir uno por 10 pesos?
  • No, gracias.
  • ¿Cuál va a ser su forma de pago?
  • Efectivo.
  • ¿Quiere aprovechar la promoción de una crema hidratante grande a precio de una pequeña?
  • No, gracias.
  • ¿Desea redondear su cuenta?
  • No.
  • ¿Necesita tiempo aire?
  • ¡No!

Uff. No tengo mucho en contra de la “modernización” —el sistema de servicio a domicilio de algunas de estas farmacias, por ejemplo, se ha vuelto bastante eficaz—, pero no creo que se deban replicar modelos de otros negocios en giros totalmente distintos. No es lo mismo que tenga hambre, pase por una baguette y me ofrezcan unas papas a la francesa, a que tenga una enfermedad, vaya por una medicina y me ofrezcan unos pañales.

Y los malditos monederos ésos… Los odio. No los quiero porque no me quiero “casar” con NINGUNA farmacia —no me gusta ni pensar que a veces DEBO ir a la farmacia, mucho menos voy a querer una membresía—, no los quiero porque no soy de los que cree que sí me “regalan” algo luego de juntar ene puntos, soy de los que sabe que esos “regalos” nos cuestan a todos clientes y que somos los que NO queremos dichas credenciales de lealtad los que más salimos perdiendo, pues nunca nos beneficiamos de ello; y no, ni por eso quiero uno… Por lo único por que he considerado solicitarlo es porque sólo así me ahorraré por lo menos tres preguntas odiosas cada visita…

Lo dicho: Entré a la farmacia con dolor de estómago. Salí con dolor de cabeza.

10 comentarios:

  1. Mi estimado Piolo, tienes razón, en todos lados te atacan con preguntas: supermercados, farmacias, fast-food, cines... el modelo del imperialismo yanqui (jaja cálmate Fidel) nos invade por querer vender más, más, más. Cada vez hace más sentido visitar la miscelánea de la esquina donde Don Cuco te hace una plática más humana que solo la robotización de parametros. jaja (o la otra es mandar a alguien a la farmacia porque te sientes mal del estomago :D )

    Saludos!!!

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  2. Qué lata. Detesto las membresías de farmacia, siento que me predispone a la enfermedad. Digo, no tiene nada que ver con la prevención realmente efectiva, como un seguro, por ejemplo. De todos modos, si de verdad quisiera que me saliera más barato el padecimiento, simplemente compraría genéricos y "tan-tan", fin de la historia. Aunque desde mi punto de vista, ya cualquier establecimiento que sea parte de una franquicia, sea cual sea el giro de éste, empieza a caer en un sistema de mercadotecnia exagerado, acartonado y poco atractivo. ¡Saludos!

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  3. Exacto. "Acartonado." Lo que te ofrecen suena tan falso, que es un desencanto instantáneo (para mí) recibir ofertas tan lejanas de la verdad. Saludos. =)

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  4. Yo fui a la tienda de Doña Mary a comprar mole Doña María y me dijo muy risueña la señora... No, vete al pollo ahi venden mole más rico, es almendrado.

    Y si, está más rico, esa señora perdio una venta por hoy, pero me ganó para siempre :)

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  5. ¡Ah, qué maravilla! ¿Y se llama "Doña Mary", neta? Uff, eso redondea la paradójica historia. Saludos :)

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  6. Es que entre las farmacias y los minisuper ya no hay mucha diferencia, espero que ya estés bien, saludos Piolo. :)

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  7. Eso es cierto. La oferta de las farmacias ya no se limita a medicamentos. Saludos, linda tarde =)

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  8. Buenas tardes Piolo! Oraleee ahora si me pusiste al corriente con eso de las McFarmacias!!! (Y no es por presumir, me enfermo muy poco:) )No sabía que ellas también ya hacen ese interrogatorio jajaja gracias por informarme asi tomaré mis precauciones para no ir por esos sitios. Saludos me encantan tus twitts

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  9. Freedom: ¡Síguete manteniendo libre y lejos de las McFarmacias! Gracias por tus comentarios. =)

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